Poesía argentina: Concepción Bertone. Selección de Marta Cwielong
La poeta Marta Cwielong (Argentina) prepara una selección de poesía argentina. Nos acerca a sus tradiciones, una de las más destacas de nuestra lengua del siglo XX hispanoamericano.
Concepción Bertone (Rosario, Argentina, 1947)
Poeta, prosista y crítica literaria
Selección de Marta Cwielong
LA MADRE
(Fragmentos)
La mujer hace al hombre. Hace
unos cuantos y después se deshace.
Henri Michaux
III
“La ausencia de la madre es un mar
en calma”, dice Lezama Lima y huye
de ella en el poema, en la palabra
paridora que desea concebirla
de otra manera. De otra manera
olvida
que la está tallando
en tesoros de música y sintaxis.
IV
La innumera madre de Vallejo,
el hambre de su carne – “los bizcochos”-
Del Cholo, los huesos. Su semen
era la leche de sus pechos. Sus versos,
todos, la tallaron en fuego.
V
Borges, cargado de culpas, la honra
y la torna una sombra
de su desdicha. La calla
en su cayado,
la talla en ébano: es la reina
cautiva en un escaque de un tablero de ajedrez.
VI
Gelman quiere morir en cada poema
de aquella “tristeza”
de su madre. Se exilia
en su recuerdo y la escribe
hasta describirse. Perro de él,
se da de comer la madre vida, la herida
de todos nosotros: su lastre de amor.
Su pena o pan de la tahona lo tañe
en la bordona del poema, gotán de él, que
triste y bello, envuelto
en su sobretodo negro
la talla en su batalla contra la muerte.
Y la gana.
“Hoy se besa, mañana no se besa”
Para Marta Cwielong
¿Por qué a nosotras nos cuesta tanto todo?
Me dijiste.
Por qué jamás
la copa llena, el vaso pleno. Pletórica
en la vena, en la cavidad palpitante
ni siquiera del corazón, sino
del camino que lleva al corazón
_ese destino de la sangre que va
rumbo a la bomba nunca desactivada, al hueco
del pecho donde algún día
estallará mi historia, en memoria de los míos
casi todos idos así_. Quizás
antes de ese momento sin solemnidad, ligero
en la bondad del alma, antes
que el reguero de pólvora devore su llama,
me sea dada la réplica.
Y tu pregunta se responderá sola
en la expansión de la onda. Porque
todo en la vida se nivela, recibe la retribución secreta,
recompone la misma balanza su fiel. Restituye
el nivel, el equilibrio por un momento roto.
La altura cae, la bajeza asciende,
un mundo plano se impone. ¿Qué caricia
vale un abrazo?. ¿Qué valor tiene el error
si no se vuelve
-en el sumo dolor- suma experiencia? Y
empero no sume, no alcance. No sé
más que la gracia que conoce la piel,
y no recoge el rencor
como su tienda, el árabe, cuando se aleja. “El amor
es eso que estás viendo, Marta:
hoy se besa mañana no
se besa”
CITA
Me he emboscado en antiguas cartas de amor
pero no hay “un bosque tan santo
que no pueda ser talado” dicen
las manos que han despejado la tierra
alrededor
de los pálidos narcisos. Yo soy esa ballena
arponeada en el Ártico de una vida anterior
que aún cruza esta agua, terca,
busco el armiño de otro polo, blanco
en invierno, pardo en el verano, salvo la punta
de su cola negra, en cualquier estación. Allí
te aguardo.
Marta Cwielong, nació en Longchamps, Buenos Aires, Argentina. Ha publicado su obra bajo los títulos: Razones para huir, De nadie, Jadeo animal, Morada (Valencia, España), Pleno de ánimas, Las vírgenes terrestres, (Observación de poetas latinoamericanas, trabajo de investigación y creación). La orilla, Memorias del hambre, (Ediciones POE Guatemala). 2 Poetas de Argentina, publicación compartida con Mariana Vacs, Ediciones Corazón de Mango, Colombia. No esperes que me anuncie, publicación bilingüe catalán-castellano compartida con el poeta valenciano Pere Bessó. Participa en numerosas antologías y festivales de Poesía de Latinoamérica. Su poesía ha sido traducida al catalán, polaco, italiano y francés. Embajadora de La Guacha Revista Nacional de Poesía.