Julio César Goyes Narváez (Colombia): Ignición
Sobre este poema se realizó un ensayo, escrito por el poeta Miyer Pineda. A continuación nuestro lector puede leerlo:
Julio César Goyes Narváez (Ipiales, Nariño, Colombia, 1960)
ÁFRICA
Virgen de Atocha salva a los negros del África que cruzan
el Mediterráneo bautizados con la sal de su merienda.
Ellos aprietan las pateras con las muelas y retan en alta
mar a las gigantes olas renovando la hazaña del manchego.
Sus ojos anegados encuentran fotografías deshidratadas
en todos los periódicos del orbe.
Todos los días la televisión regala al mundo spots de invasores
venidos de los cuatro puntos cardinales.
Soy África, en mi sueña el primer hombre.
Todos somos negros —mujer divina— no se puede olvidar
la emoción del primer fuego. Andan por las calles
con una dirección arrugada en la mano y su columna de
Sansón saluda a los que han vencido con una sonrisita de
perdón por haber venido.
Si puedes —Virgen de Atocha— dales también una mano
a los del Éste y a los Latinoamericanos —de pasada—,
pueda ser que estemos inmigrando desde que nacimos
y no encontremos reposo en esta tierra. Detén a los que
negocian con el secreto de sus lenguas e incluyen en sus
compras el deseo de los niños envuelto en su propia eternidad.
Mira que sus mochilas exhibidas en los almacenes
de cadena están estampadas con el sida de su historia.
Soy una patera sin escora rechazada en todos los puertos.
Virgen de Atocha, tal vez el hambre requiera de vez en
cuando un milagro en alianza con la Guadalupana y con
la Virgen de Las Lajas que vive en Ipiales velada por madres
bondadosas.
Haz que sus cuerpos no se desplomen en las esquinas de
Lavapiés y de Atocha, que tengan —señora nuestra— el
ingenio para convertir la lluvia de Madrid en agua potable
para su sed de vida.
Yo soy África, en mí sueña el primer hombre.
MORIN KHUUR
Ahora lo sé, aguarda en la cinematografía
de mi memoria:
la estepa arrebatada
por un caballo mongol, sus cascos restableciendo
el antiguo vínculo con los espíritus.
Yo soy morin khuur, el baile sobre la nieve.
Una niña ansía reencarnar cuando muera,
su mirada sesga presiente el galope de la tormenta
bajando de las montañas.
Más allá
el perro mongol habla con el viento,
señala con su cola al buitre que amenazaba al niño.
El desierto huele a leche tibia batida por la madre
para que madrugue en la casa nómada,
el padre reza su centro agradecido por los días
en que la familia abrigó su memoria sedentaria.
Yo soy la cabra inmóvil en la estepa,
leve polvo en el camino.
para Sina Sang
EL ÁGUILA
Los cazadores se regocijan con el águila que sigue
las huellas de un zorro herido en la nieve,
es un sacrificio mongol, su piel ayuda a soportar
el frío de la estepa.
Envuelta en una caperuza el ave aguarda ver el mundo
para combatirlo como si fuera la primera vez.
Siempre regresa al brazo del kazajo que monta su caballo.
Soy al ave rapaz de Gengis Kan, la horda paciente
que incendió el Asia para darle claridad
al resto de la tierra.
Las águilas doradas guían el deseo de las niñas atrapado
en su visión, es un ritual exclusivo de los Berkutchis,
guardianes de un ritual de siglos que ata lo salvaje
a la vida nómade de las familias que cruzan
las montañas Altái.
Yo soy uno de esos cazadores que luchan por dejar rastro
en la tormenta helada y nubarrones en la página blanca.
Julio César Goyes Narváez (Ipiales, Nariño, Colombia, 1960). Poeta, ensayista y realizador audiovisual. Profesor del Instituto de Estudios en Comunicación y Cultura -IECO- de la Universidad Nacional de Colombia. Autor de Tejedor de instantes (1992),El rumor de la otra orilla: la poesía de Aurelio Arturo (1995), Imago silencio (1996), Imaginario postal (2010), Nubes verdes para una ciudad gris (2010), La escena secreta y el secreto de la escena (ensayo, 2011), La imaginación poética (ensayo, 2012), Arrayán (2013), La mirada espejeante: el cine de Tarkovski (Ensayo, 2016), Pausada percusión (2019), Guáitara (antología personal, 2020), Ignición, Valparaíso ediciones, Granada, España (2021).