Poesía

Alejandro Ogando (Argentina)

 

 

 

Alejandro Ogando (Argentina)

 

 

3 - Extracción

 

Extraer la belleza, enseñar a ver en el aprender a observar lentamente

Ir hacia el origen, sentir la esencia en su desconocer eterno

Tomar la semilla del fruto, extraer su jugo, sembrar agradecimiento

Brotar en otoño, plantar primaveras: morir eterno

 

Iniciar la búsqueda del comienzo, arrojarse a la incertidumbre

Me abro a este transitar incierto, me despojo de lo poseído en su poseer

 

Soy árbol, hoja, tierra, mero viento en su andar

Anhelo fluir en el éter, ser historia, pero tan solo soy instante

 

Nadie me recordará…

 

 

 

 

4 - Instante

 

Este atardecer nunca será de nuevo

Esta noche no retornará otra vez

Este ritual del habitar será irrepetible

Este encuentro será único y eterno

 

Pero los dioses entre nosotros siempre volverán

 

Caminar en el camino que siempre será distinto en su transitar es un existir

Caminar hacia la muerte es un fluir: aprendizaje

 

Instante, bello e irrepetible, me arrojo hacía ti

Los encuentros pasados, los bosques andados: vida

 

Ver nuevamente, ver en verdad

 

Muero en cada atardecer…

Florezco en cada otoño

 

 

 

 

6 - Kaûma

 

Sopla un leve viento, la calma invade la atmosfera

La serenidad acaece, el tiempo del contemplar se da a conocer

Los primeros hombres conocen bien este estado

Allí fue cuando en angustia todo comenzó, cuando la nada los penetro: krísis

 

Silencio en el aire, ocaso en el horizonte: meditación

Austro se detiene un momento, tan solo se dispone al acariciar

Mar en calma, árboles en cuidado, arena plana, las hojas en descanso

El caminar se vuelve lento, el meditar es la única regla

 

Silencio y lentitud rigen en la calma e invitan al detenimiento del pensamiento

El razonar da un paso al costado, la sensibilidad pasa al frente

La melancolía ocupa su espacio en el apaciguar

El aquietar camina hasta detenerse para dejar fluir a Kaûma

 

En ese preciso momento los dioses volvieron a nacer

Tal cual como sucedió hace miles de años al descubrirse el sin sentido

Cuando los primeros hombres en tristeza conocieron la sabiduría del crear

Cuando el misterio regia los cielos y el secreto caminaba en libertad por la tierra

 

En ese recóndito lugar, cuando el adulto en su meditación se permitió jugar de nuevo

En ese nuevo lugar, cuando despojados de toda regla nos dispusimos a poetizar

 

 

 

 

7 - Camino

 

Lo oscuro, aquello que permanece oculto

Lo luminoso, lo que se ha desocultado

El punto medio, allí donde se refugia el misterio

 

En la oscuridad nos encontramos

Hacia la luminosidad buscamos avanzar

 

Nunca llegaremos hacia la luz en plenitud

Jamás abandonaremos del todo la oscuridad

Siempre permaneceremos atados al misterio

 

Aquí es donde aún estamos aprendiendo a caminar...

 

 

 

 

9 - Historia relatada

 

Hermes me ha moldeado en su transformar

Heráclito me ha expulsado de la tierra firme y me ha empujado a sus ríos de cambio

Prometeo me da su fuego, anhela que cree lo que vendrá

Helios me observa desde lo alto, me regala sus ocasos para inspirarme

Selene brilla al verme, la noche me embriaga de pasión y lujuria

La angustia convierte este deseo en belleza engañosa

 

En el bosque me pierdo, en las hojas me descubro: soy tan solo viento

 

 

 

 

10 - Cielo gris

 

Las hojas caen del árbol, mis pasos flotan en el ralentizar del existir

La lluvia se torna calma, el gris es tormentoso, mis pensamientos se convierten en dagas

Las ramas chocan entre sí, ya no hay hojas, solo un caminante debajo de ellas observando a los pájaros que buscan resguardo en la plena vista

 

¿Podré recuperar lo perdido que ya no recuerdo? El dios del olvido impone su voluntad

Los ríos de Heráclito fluyen, pero mi camino es en tierra pantanosa que busca ser lago

 

Forjar firmamento, construir nuevas nubes, pintar poemas: calma

 

Lluvia en el techo, el pasto está seco, el verde estalla en mis ojos y la armonía en mi esencia desconocida y oculta brota por instantes

 

El bosque se ha tornado otoñal y amarillo, mi vida parece retornar al orden: crisis

Océano se muestra bravío, le gusta enseñar su poderío, allí donde danza violentamente Tetis

 

El cielo hoy es gris, ¿pero no es acaso este el verdadero color de las cosas?

El sol en exceso nos ciega y la noche nos oculta los entes, pero este gris nos deja ver todo sin cegarnos

 

Sí, creo que este es el verdadero color de las cosas

Este gris es el auténtico color de mi alma

 

 

 

 

Alejandro Ogando. Estudiante de filosofía. Escribe artículos filosóficos y poesías que han sido publicados en diferentes revistas. Ama la filosofía pero se siente más poeta, por lo cual sus escritos giran en torno a la búsqueda de la esencia de las cosas y extraer la belleza de la existencia.  Tiene un blog donde pueden encontrar todos sus escritos: https://senderos-montana.blogspot.com/